El presupuesto familiar es de suma importancia, ya que es la clave para lograr mantener el buen funcionamiento del hogar, pero no debe de ser causa para generar problemas de convivencia.

La negociación adecuada es la clave fundamental para lograr el presupuesto adecuado sin que haya resentimientos o problemas que causen conflictos familiares.

Esta negociación se puede dividir en 4 fases:

Fase 1: Exposición

Cada integrante de la familia expone el problema desde su punto de vista con absoluta sinceridad.

Fase 2: Solución

Cada integrante propone una solución clara, lógica y factible que tome en cuenta los intereses de las demás personas.

Fase 3: Elección

Se debate y se pacta una solución satisfactoria con el convencimiento de que es la mejor posible.

Fase 4: Práctica

Se pone a prueba la solución pactada y se valora su funcionamiento, de otra forma se regresa a las fases anteriores.

Estos pasos ayudan a tener una negociación tranquila y con ello lograr buenos resultados para poder completar el dinero que se requiere para cumplir con todo lo que se establece en el presupuesto familiar.

Si en algún momento la situación se complica podría seguir los siguientes consejos y buscar lograr el objetivo que al final de cuestas es lograr el monto necesario y seguir siendo una familia unida.

Enfocarse en el tema, es decir evitar temas ajenos a la situación principal, especialmente si son personales, con tal de llegar rápidamente a una solución que beneficie al grupo.

No dejarse dominar por las emociones, estas se deben de controlar para evitar caer en descalificar, humillar o ridiculizar a la otra persona. Además se debe de aprender a pedir disculpas y a aceptarlas.

Fomentar las relaciones familiares positivas, evitando rivalidades y solucionando los problemas personales a tiempo todo con el fin de mantener la buena convivencia y llegar a una solución de cualquier conflicto presente o futuro.

Respetar el turno de opinión de cada integrante y antes de hacer objeciones expresar que los comprendes, sin hacer juicios de valor sobre la persona, sino sobre su argumento.

Así el hogar y la familia podrán caminar bien que al final es lo que a todos les importa.